Domingo complicado
El día amaneció hermoso, preparé mate como todas las mañanas y me puse a regar las plantas! A media mañana charlaba con Roberto antes de partir a San Javier a comprar cositas para el almuerzo y Helenita se nos sumó por un rato y de repente salta de entre los arbustos, como asustada, siempre anda metiendo el hocico en los pozos!! Al mirarlale sangraba la nariz... pensé... la mordió una víbora! Imaginamos que nada malo podía suceder y me fui.
Al regresar, Helena había tenido un shock y estaba toda inflamada y sangrando por la herida, efectivamente era una serpiente. Llamamos a José, mi vecino, para preguntarle si conocía otro veterinario porque el mío no respondía y fuimos con una pala al lugar donde había sucedido el hecho y encontramos un hueco y al escarbar la pudimos sacar, era una yarará que al abrirla en su interior se estaba degustado un pequeño ratón!
Al regresar, Helena había tenido un shock y estaba toda inflamada y sangrando por la herida, efectivamente era una serpiente. Llamamos a José, mi vecino, para preguntarle si conocía otro veterinario porque el mío no respondía y fuimos con una pala al lugar donde había sucedido el hecho y encontramos un hueco y al escarbar la pudimos sacar, era una yarará que al abrirla en su interior se estaba degustado un pequeño ratón!
Por suerte nos contestó el veterinario que si bien había viajado a Buenos Aires, nos dejó retirar de su casa suero antiofídico y con José se lo pudimos inyectar junto con suero para detener los efectos del veneno. A la hora, ya con todo el suero en su interior, se levantó, bebió agua y nos dio la señal que ya estaba mejor aunque le llevará muchos días desinflamarse y ver si no quedan secuelas. Mientras tanto le habíamos retirado los cachorros por temor a que mediante la leche le transmitiera el veneno pero esto no sucede nunca, asi que una vez más tranquila y sin sangrar se los devolvimos. Ya había comprado mamadera y leche deslactosada para darles si Helenita no podía! Qué domingo no? Con la estadía de Roberto en casa y la asistencia de José, me sentí acompañado y hubo momentos para reflexionar sobre muchas cosas... la transitoriedad de la vida, la fragilidad, la naturaleza, el desapego, los miedos, la incertidumbre y todo el trabajo interno que uno hace viviendo en estos lugares! Y todo termina en un punto muy sencillo... la paz interior! Lo externo puede cambiar, terminar, complicarse pero lo interno puede mantenerse firme y sereno porque sin dudas, todo lo demás es ilusión del ego... la paz de Dios es lo único verdadero.
Pensar esto no evitó angustiarme y ponerme ansioso pero se fue superando según transcurrían las horas. La naturaleza tiene su propio comportamiento y es la aceptación el único camino, sino qué quedaría? Eliminar todas las serpientes? Eliminar los ratones de los que se alimentan las serpientes? Desmontar todo el lote? No tener mascotas por temor a perderlas? Y tantas opciones más que no harían sino empeorar la situación, como hemos hecho los humanos al desviar ríos, talar selvas, modificar el clima, eliminar especies, intervenir geneticamente en otras... si al final todos nos vamos y sólo importa la paz de Dios!!!!! Puff... qué alivio sentir eso... quería compartirlo porque se siente suave al alma y liberador! Gracias por estar del otro lado y aceptar compartir conmigo estas vivencias!!!!!
Miren este atardecer, con las flores de la zanahoria
y las del ajo, las lavandas... la luz...
Es igual de bello que la serpiente, y el tornado
Es igual de bello que la serpiente, y el tornado
y el aroma de los jazmines...
Tenemos miedo... eso nos cambia la perspectiva!!!!!!!
Tenemos miedo... eso nos cambia la perspectiva!!!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario