La Nave Cósmica

Cuenco, cerveza y haiku

28-07-2010
Hola queridísimos amigos de La Nave, cómo están? Aquí muyy bien, terminando la jornada, que ha sido bastante larga. Comencé el día realmente en paz, el sol salió radiante por dentrás de las montañas entibiando la mañana. A las 11 pasó el verdulero, hice mi compra de la semana y me ayudó Andrecito a entrar todo. Compartimos unos mates y me puse a trabajar un poco en la compu, pero el trabajo comenzó a complicarse y a raíz de un par de correos mi energía cambió. A tal punto que tuve que irme a sentar al sol para bajar la mala onda, que por estos tiempos es raro en mi, y comencé todo un proceso mental para poder entender en qué me había afectado. Lo charlamos un poco con Andrés y llegamos a la conclusión que era puro EGO. El EGO busca siempre la reconfirmación externa, no le alcanza con sentirse inteligente, quiere que se lo digan, no le alcanza con sentirse responsable, quiere que se lo hagan sentir y cuando eso no sucede, se enoja. Eso le sucedió a mi EGO, yo me considero una persona muy responsable en el trabajo, pero si lo ponen en duda entonces me enojo, qué tonto no? Jejeje para qué buscar la reconfirmación externa, por qué enojarme... Decidí después de almorzar irme a Dolores, caminé los 3 km hasta la ruta y esperé el bus. Justo pasa un vecino que vive al fondo del camino por mi casa y que día por medio trae su celular a cargar a La Nave porque no tienen luz, y me ofrece llevarme. Ahi me subí al Renault 12, un tanto desvencijado, pero contento de ir en coche, conversando con sus hijitas. Pero a los pocos km se quedan sin nafta, jejeje asi que tuve que esperar el bus nomás! Veía que la tarde se complicaba tambien, y mi cabeza no paraba de pensar, mi mente iba del enojo de la mañana a temas que fueron hace mucho o que quizás ni han sucedido aún, pasado y futuro eran la misma cosa. Llegué a Dolores, compré lo que necesitaba y en la terminal retiré una encomienda que me habían enviado Víctor y María Inés de Buenos Aires. A las 7 el bus me dejó en la ruta, ya había bajado el sol y tenía mis 3 km hasta casa pero me abrigué y comencé a caminar. Pensaba y pensaba hasta que en un momento dije basta! Por qué estar enganchado en tanta ilusión, qué pasa si un día uno no llega con algo o se complica, nada es de vida o muerte, absolutamente nada! YO SOY el que pongo las condiciones en el mundo que me rodea, YO SOY el que determina, siembra y recibe, entonces era hora de relajarse y descansar. Estoy entregando mi vida a este propósito, y cada día me siento más en armonía y con más fe! Y me invadió una paz maravillosa!!!!!! Y cuando esa sensación llegó, faltando 1 km y medio, pasa nuevamente mi vecino y me alcanza hasta casa, evidentemente sintonicé con el Universo y ahi estaba la respuesta. Cuando llegué a La Nave, Andrecito había trabajado como loco, regando, acomodando tierra, ya tenía prendido el fuego para asar unas verduras en el disco, el mate a punto, las verduras peladas, maravilloso. Ahi nomás me puse a preparar el famoso budín de mijo, lo puse al horno y me fuí frente al fuego a abrir la encomienda y me encuentro con un regalo realmente hermoso, un cuenco y un para de botellitas de cerveza casera que fabrica personalmente Víctor. Lo hicimos sonar frente a la fogata y miramos las estrellas que parecían vibrar al unísono con ese sonido perfecto!!!!. Las cervezas fueron a la heladera y cuando la cena estuvo lista, justo llamó Víctor por teléfono y me explicó cómo estaban elaboradas. La comida estuvo riquísima, la cerveza super deliciosa, y el postre con crema espectacular. El día había terminado de una forma armoniosa, y sabrosa tambien, jejeeje y como último regalo de la noche recibo un correo de María, que habían estado con Jorge su marido la semana pasada, y me escribe un Haiku que paso a transcribir porque es muy bello:


Cielo, silencio, montañas...
Reino del sol y de La Paz
La Nave Cosmica.

Ahora sí creo que puedo descansar en la Paz del amor de tanta gente. Qué diferente sería el mundo si todos pudiésemos vincularnos así, de esta manera, en armonía, con amor y tanta generosidad. Les mando desde aquí un abrazo inmenso, y fotitos de la jornada. GRACIAS María Inés, Víctor, María!!!!!!!  

Almorzando en un día de sol

Aunque no tomamos alcohol en La Nave,
hicimos la excepción degustando la cervecita
que mandó Víctor de regalo